sábado, 17 de diciembre de 2011
LAS FOTOGRAFIAS DEL PATRIMONIO DE QUEQUEN
ESTACION DE FERROCARRIL QUEQUEN
FARO QUEQUEN Y ESCUELA N|°5 PROYECTO DE LA FAMILIA GUERRICO
. Próximo a esta área se distingue desde lejos, el Faro construido en 1921 por la familia Guerrico representando el pueblo no fundado que proyectó la Sociedad Anónima” Ciudad de Quequén” al igual que la Escuela Nº5, donada por la misma familia.
RESIDENCIAS VERANIEGAS DE QUEQUEN primeros años siglo XX |
"CASONA ASTELARRA"
"CASONA CARBALLIDO"
EL PUERTO DE QUEQUEN
El Puerto Quequén fue construido entre 1911 y 1921 por la compañía “Grands Travaux de Marseille” y conforma uno de los patrimonios industriales más importantes del núcleo urbano.
Aquí se localizan, el edificio de Prefectura Nacional Argentina, el de Vías Navegables y la Estación Hidrobiológica ( antiguo obrador montado para la construcción del puerto), todos construidos en el periodo de construccion del puerto en distintos estilos pintoresquistas y configuran un paisaje urbano de gran valor histórico arquitectónico urbano, que se completa con los elevadores Ministro Antonio Tomaso construidos en 1945 en el estilo racionalista imperante en estos años.
EL PATRIMONIO URBANO ARQUITECTONICO DE QUEQUEN
HISTORIA DE QUEQUEN
jueves, 8 de diciembre de 2011
La Rambla
Entrada de la Rambla Municipal.
Vista desde la playa, el basamento se conserva cubierto de arena, las construcciones a nivel de la Av lamentablemente perdidas.
Tarjeta Postal, "Editorial Codex", La Rambla
Tarjeta Postal de la época, sector oeste de la Rambla
Tarjeta Postal de "La Artística" N°10, Paseo Av 9 de julio y Rambla Municipal, podemos ver las Plazoletas con diseño y el arbolado de línea, asi como la duna fijada con especies vegetales.
miércoles, 7 de diciembre de 2011
Plaza Dardo Rocha
Platanos en primavera (foto Eugenia kuc)
Platanos en Otoño (foto Eugenia Kuc) , esta especie hace a la identidad de la plaza ,crando un espacio de recorrido de gran valor.
Relevamiento del Arbolado de la Plaza Dardo Rocha
Tarjeta Postal del Editorial Codex donde apreciamos la palmera Phenix Canariensis y el arbolado en su etapa inicial.
Tarjeta Postal de Editorial Codex
En verano, en el centro una rotonda que marca los puntos cardinales, aun no tenia acceso el automóvil.
En invierno, vista desde la calle 56 entre 6| y 59 , aun estaban unificadas las 4 manzanas
Tarjeta postal de "La Artistica" donde vemos La Iglesia, Municipalidad antigua , la pergola en la Plaza y los Platanos tallados (poda de formación en forma de copa), esta especie es el motivo principal del diseño paisajistico, acompañando el recorrido perimetral y de las diagonales.
Pergola de la Plaza sobre la Av 58 soporta una Glisina
Monumento a Mariano Necochea
Hace un siglo
Monumento del Centenario de la Ciudad en el sector Norte de la Plaza
martes, 6 de diciembre de 2011
Recuperemos lo que queda
Jardin de la Casa Parroquial de La Iglesia Santa Maria del Carmen, patrimonio perdido y olvidado. foto de Tina Nielsen
La Rambla, patrimonio perdido, aun existe su base.
La Juanita en Av 59 y 26, patrimonio demolido.
Molino en Av 59 en vias de recuperación.
En el Anuario de Ecos Diario de 1936
Demoliciones en la década del 70
También mencionaremos el destino del patrimonio reciente o el estado reciente del patrimonio. El Parque Miguel Lillo, surgido por la mano del hombre a partir de su expropiación a la familia Díaz Vélez y que debe su existencia al Ing. Edgard Gatti, al igual que gran parte del paisaje verde de la ciudad que nació en su vivero Dunícola, constituye el área patrimonial de valor simbólico, cultural y ambiental más importante de la ciudad. En su interior ubicamos el Complejo Casino, el área lúdica, escenario del “Festival Infantil” y el Area Museológica más importante de la Ciudad.
Desde 1970 en adelante se produjeron la mayor cantidad de demoliciones de edificios patrimoniales, entre los que ya hemos mencionado, la Rambla, las Casonas y el primer Palacio Municipal, como también las intervenciones y reciclados de dudosa calidad en varias esquinas céntricas.
Recuperar lo recuperable
Un nuevo fenómeno urbano ha surgido actualmente a partir del crecimiento de las ciudades a nivel mundial y Necochea no ha sido ajena a esta extensión territorial producida por cambios en la modalidad de su uso, la cual ha producido la descentralización en focos menores, autónomos, creadores de nuevas referencias e identidades.
De este modo, el surgimiento y crecimiento de nuevas identidades a partir de nuevos centros alejados del centro tradicional, ha permitido distraer la atención del área central de indudable valor histórico y sitio de confluencia socio–cultural de una comunidad, que lo reconoce como “centro viejo o centro histórico de Necochea”. Así se ha producido una crisis de centralidad que ha afectado su acervo constructivo de valor patrimonial y “esta crisis, es una crisis de protagonismo, no de existencia”
Actualmente, con una legislación que existe pero que no se hace cumplir, el patrimonio necochense sigue perdiendo inmuebles o sitios de valor debido a la importante inversión inmobiliaria existente en el centro histórico de Necochea especialmente. La construcción compulsiva basada en la demolición de antiguos edificios se refleja en la plaza fundacional donde ya se han proyectado y comienzan a erigirse los tan mencionados edificios en altura que rompen la escala original de los pueblos del interior sin mejorar el paisaje urbano.
El área de “antigua centralidad” no ha dejado de existir a pesar de su deterioro ambiental y de su paisaje urbano alterado. Si bien su categoría urbana se resiste a delimitaciones precisas del espacio, se reconoce por ciertos caracteres de acumulación histórica, por ciertas huellas de una pasada concentración de actividades, una cierta continuidad en la intensidad de uso y flujos circulatorios y una significación histórico cultural a pesar de los efectos negativos que sufre, por la contaminación visual, el deterioro del patrimonio histórico y edilicio y la degradación del paisaje natural en el espacio público.
Así, en la plaza principal Dardo Rocha, dado su carácter de centralidad primaria en el lugar privilegiado de la memoria, quedan ciertas marcas del asentamiento primitivo, aloja un patrimonio propio que proviene de los albores de la fundación y concentra los valores históricos, sociales, simbólicos, como la referencia más estable de la ciudad que se expande.
Creemos que ésta área central “es el espacio público plurisignificante con potencial de progreso agregado por sus posibilidades infraestructurales y simbólicas para tensar las posibilidades de generación de una urbanidad contemporánea, sobre todo, el lugar oportuno para un despliegue de una política de la memoria”, según la definición de Javier Fedele.
Recentrar la centralidad de la plaza requiere la puesta en marcha de nuevos mecanismos de planificación, en función de un proyecto integral de reordenamiento de los distintos centros, requiere proyectos que redefinan con criterios nuevos los viejos mensajes de la estructura preexistente, y por último, requiere de creativas acciones para reinsertar los edificios históricos en la actual dinámica de la ciudad, generando un orden y equilibrio estable entre lo público y lo privado, el peatón y el automóvil, lo verde y lo construido, tradición y modernidad.
En este contexto, tal vez sea muy ambicioso rescatar la antigua vitalidad y calidad del área central, pero sí sería apropiado frenar su proceso de degradación y alteración.
Las áreas patrimoniales reconocidas, debatidas, intervenidas, degradadas, de alto impacto estético y ambiental, han concentrado la lectura más atenta de todos los actores de la ciudad. En este patrimonio las decisiones de intervención, no deberían ser decisiones privadas, ni especializadas, ni especulativas, ni políticas; estas decisiones deberían ser participativas y con el consenso general de toda la comunidad.
“Sólo así será posible “recuperar lo recuperable”: la memoria colectiva de nuestra historia, a partir de la conservación del patrimonio urbano – arquitectónico heredado”